— ¡Mamá!, en la escuela hay una niña que tiene piojos — exclama tu hija después de un largo día de clases —.
— ¿Cómo? — respondes atónita — ¿¡Quién te dijo eso!?
— La maestra la mandó para su casa porque se estaba rascando mucho la cabeza — argumenta ella —.
En ese preciso instante se activa el modo “Madre desesperada”, te recoges el cabello y empiezas a revisar minuciosamente la cabeza de tu hija. Después de unos pocos minutos te enfrentas con lo inevitable…
17 letras, 4 palabras, 1 sentimiento: Mi hija tiene piojos.
¡Terror! Una gota de sudor frío empieza correr por tu espalda al ver a esos minúsculos animales caminando rimbombantes por la cabeza de tu hija, tan tranquilos como si estuviesen haciendo compras en el Bulevar de Sábana Grande. Respiras profundo, mantienes la calma y, como toda madre temeraria, comienzas la batalla.
Sí, todos hemos (o estamos pasando) por una experiencia similar. Y lo primero que debes hacer para ganar esta lucha, es informarte. Por eso me he dado a la tarea de escribir para ti una guía de lo más completa sobre los piojos, para que puedas prevenirlos o, si ya es demasiado tarde, atacarlos hasta eliminarlos por completo.
¿Estás listo? Comencemos.
¿Qué son los piojos?
Los piojos son pequeños insectos parásitos que se alimentan de la sangre de los seres humanos y los animales. Pueden infectar a las personas que entran en contacto con el pelo y la ropa de una persona infectada. Los piojos son más comunes entre los niños de 5 a 12 años, pero pueden afectar a cualquier persona.
Los huevos de los piojos eclosionan entre 3 y 7 días después de su puesta. Los huevos eclosionan en ninfas (piojos inmaduros) que parecen pequeños huevos blancos con un punto negro en el centro. Estos desagradables animalillos maduran en un plazo de 10 a 14 días y pueden vivir hasta 2 meses con la sangre humana.
Las ninfas abandonan el pelo del huésped y se adhieren a superficies limpias, como peines y cepillos, donde pasan por tres mudas (fases larvarias). En cada muda posterior, la larva aumenta de tamaño y desarrolla más dientes hasta que está preparada para desprenderse de la cabeza de su huésped y mudar a piojo adulto.
¿Cómo se contagian los piojos?
Pueden proliferar en lugares muy concurridos, como escuelas, guarderías y gimnasios. Algunas personas llevan los huevos (llamados liendres) en el pelo durante meses antes de que eclosionen.
La principal fuente de contagio es el contacto directo cabeza a cabeza con una persona que tiene piojos. Esto puede ocurrir cuando compartes la cama o la escuela con alguien que tiene piojos. Pero también pueden propagarse al compartir peines, sombreros, toallas u otros objetos personales.
Los síntomas de la infestación por piojos son el enrojecimiento y el picor alrededor del cuero cabelludo. También se pueden ver pequeños puntos blancos (huevos de piojo) en el pelo que parecen trozos de caspa. Las crías de piojos que nacen de estos huevos se alimentan de la sangre durante unas 3 o 4 semanas antes de morir.
¿Cómo evitar los piojos?
Cualquiera puede tener piojos, incluso los que tienen el pelo limpio y ordenado. Aunque nunca podrás evitar por completo que tu hijo se contagie de piojos, hay algunas formas de ayudar a reducir el riesgo:
La forma más eficaz de prevenir el contagio de los piojos es no compartir accesorios para el cabello, como sombreros, pañuelos o incluso peines o cepillos.
Mantén el pelo limpio y seco en todo momento: recógelo en un moño apretado si acostumbra a llevarlo suelto.
Usar sombreros y cubrirse la cabeza protegerá el cabello y mantendrá los piojos fuera de él.
Mantén una buena higiene: lava la ropa de tu hijo y su ropa de cama con frecuencia, especialmente si la comparte con otras personas.
Además, asegúrate de revisar los recovecos de su cuero cabelludo para detectar cualquier signo de infestación. Si encuentras algo parecido a un piojo, asegúrate de eliminarlo del cabello lo antes posible.
Nunca es demasiado pronto para empezar a hablar con tu hijo sobre cómo mantener su
cuerpo limpio y sus hábitos saludables para que sea menos probable que contraiga piojos o cualquier otra infección.
¿Cuál es el mejor tratamiento para los piojos?
No hay riesgos graves para la salud asociados a la presencia de piojos. Sin embargo, pueden ser molestos y provocar picores y rascado que pueden dar lugar a una infección secundaria como la foliculitis bacteriana o una erupción causada por la irritación de la piel.
Si tú o tu hijo tienen piojos, esto es lo que debe saber sobre las opciones de tratamiento:
Tratamientos químicos para los piojos
Estos tratamientos utilizan insecticidas para matar los piojos y las liendres (sus huevos). Existen varios tratamientos químicos para los piojos de venta libre, pero no todos son seguros para todo el mundo. Tu médico de cabecera puede ayudarte a decidir cuál es el más adecuado para ti y los miembros de tu familia. Entre los más reconocidos de venta libre se encuentran los siguientes:
Ivermectina para los piojos
La ivermectina se utiliza para tratar parásitos como los piojos y la sarna. Actúa matando a los organismos parasitarios, lo que impide que se propaguen a otras personas y causen enfermedades. La ivermectina está disponible en forma de crema, loción, spray y pastillas.
En forma de loción, la ivermectina puede ser usada por adultos y niños mayores al año de edad, se aplica en el cabello seco por unos 10 minutos y luego se enjuaga con abundante agua.
Permetrina
se utiliza para tratar la sarna, los piojos y otras infestaciones parasitarias. Está disponible en forma de crema o champú. Actúa matando a los parásitos por contacto con la piel. Por lo general, su uso es seguro durante el embarazo y la lactancia, pero no debe utilizarse en niños menores de 12 meses.
La permetrina debe aplicarse sólo en las zonas secas del cabello y el cuero cabelludo. El tratamiento debe repetirse diariamente durante 3-5 días hasta que desaparezcan todos los parásitos visibles. Después del tratamiento, es importante lavarse el pelo con agua tibia y aplicar un acondicionador que contenga ingredientes como el aceite de árbol de té (aquí agregamos un link que lleve al artículo de aceite esencial de árbol de té) para proteger el pelo de la sequedad y la rotura.
Piretrinas
Las piretrinas son un tipo de insecticida derivado de la planta del crisantemo. Este químico se caracteriza por matar únicamente a los piojos vivos, es decir, no ataca a los huevos que todavía no han eclosionado (las liendres). Si tu hijo es alérgico al cristanemo, evita usar piretrinas para combatir los piojos. De igual forma, como las piretrinas pueden provocar reacciones alérgicas en algunas personas, es importante probar el producto en una pequeña zona de la piel antes de utilizarlo en toda la cabeza.
Aplica la piretrina sobre el cuero cabelludo seco y deja actuar por 10 minutos, durante ese tiempo puedes mantener el cabello tapado con un gorro de baño. Después, enjuaga con champú y agua tibia hasta retirar el producto por completo.
Tratamientos naturales para los piojos
Las reacciones alérgicas y efectos secundarios son algunas de las consecuencias comunes al aplicar remedios químicos para eliminar los piojos. Como madre, me preocupo demasiado por el bienestar de mis hijos, y he procurado evitar el uso de cualquier tipo de sustancia química que afecte su salud, ¡por eso soy amante de los remedios naturales para eliminar los piojos! Lee con atención y descubre algunos de los más efectivos (comprobados por mi propia experiencia):
Aceite con esencia de romero
El aceite de romero tiene propiedades antifúngicas y antimicrobianas que pueden matar los piojos y los huevos al contacto. Se ha demostrado que los aceites esenciales del aceite de romero eliminan una amplia gama de patógenos, incluyendo bacterias, hongos y virus.
Unas gotas de aceite de romero en el cuero cabelludo cada día pueden ayudar a eliminar los piojos. Cuando utilices aceites esenciales, dilúyelos siempre primero mezclándolos con un aceite portador (como el de coco o el de jojoba) antes de aplicarlos directamente sobre el cuero cabelludo. Deja actuar por 30 minutos y luego retira con abundante agua.
Eucalipto para eliminar los piojos
El eucalipto es un excelente remedio natural para tratar los piojos. Los aceites esenciales del eucalipto son antisépticos, antiinflamatorios y antimicrobianos. Muchas personas eligen el aceite de eucalipto para tratar los piojos porque es seguro, barato y fácil de usar.
El primer método consiste en frotar unas gotas de aceite en el cuero cabelludo de tu hijo antes de acostarse cada noche. Esto ayudará a eliminar las liendres y los huevos que hayan quedado latentes en el tallo del cabello. También puedes combinarlo con el aceite de árbol de té. La combinación de estos dos aceites da lugar a un potente tratamiento natural contra los piojos que puede utilizarse con seguridad tanto en niños como en adultos.
Es importante recordar que esta mezcla sigue siendo muy concentrada, así que asegúrate de diluirla adecuadamente con otros aceites portadores antes de aplicarla en el cuero cabelludo.
Loción, champú y sprays con propiedades naturales
En las farmacias también venden productos con bases naturales para combatir los piojos, generalmente se trata de un kit con varios pasos para eliminar, prevenir y proteger a los niños de los piojos y liendres.
Estos kits son muy efectivos, ya que están elaborados con una combinación de activos naturales que protegen a tus hijos de liendres y piojos tales como el árbol de té, la citronela, el cedro, la lavanda, el aloe vera, la manzanilla, el eucalipto, el coco, la soya, el neem, entre otros.
De esta forma, es posible recabar lo mejor y más eficaz de la naturaleza en un solo tratamiento, para que le des a tu hijo el mejor cuidado durante y después de eliminar los piojos por completo. Esto sin riesgo de reacciones alérgicas y otros efectos secundarios.
Sea cual sea el producto que utilices, es recomendable tener un peine para piojos, así podrás retirar los piojos muertos y liendras una vez haya hecho efecto el producto.
Curiosidades de los piojos
Más de mil millones de personas se ven afectadas por los piojos humanos cada año. Aunque es muy desagradable enfrentarse a estas plagas, también hay algo bastante intrigante en ellas... De hecho, los piojos existen desde hace millones de años; los primeros registros fósiles se remontan al periodo Cretácico, ¡hace más de 66 millones de años!
Si quieres saberlo todo sobre estas espeluznantes criaturas, ¡tengo algunas curiosidades sobre ellas para ti!
Los piojos manifiestan una fuerte preferencia por la nuca (donde el pelo suele ser más largo). Suelen depositar sus huevos detrás de las orejas, ya que permanecen calientes a uno o dos milímetros del cuero cabelludo.
La mejor técnica para eliminar los piojos es utilizar un tratamiento combinado, ¿qué quiero decir con esto? Algún producto natural o químico, en conjunto con tu peinecillo especial.
Tener un cabello con tendencia grasosa no es algo que nos guste demasiado, pero ¡veamos el lado positivo! Los piojos detestan el sebo en el cuero cabelludo, por esa razón es que la mayoría de los adultos no son infestados con piojos. Los más propensos son los niños entre sus 3 y 12 años.
Además de los piojos de la cabeza (cuyo nombre científico es Pediculus humanus capitis), también existen los piojos corporales (Pediculus humanus corporis) que habitan en sábanas, ropas y toallas. Por último tenemos los piojos púbicos (Pthirus pubis) que pueden transmitirse por contacto sexual.
¡Los piojos aman con locura el cabello limpio! ¿Por qué? Porque no se alimentan de la suciedad, sino de la sangre. Un cabello sucio les impedirá conseguir fácilmente las venas del cuero cabelludo para poder alimentarse. Por este motivo, también se acomodan mejor en los cabellos lisos.
Los piojos no saltan de una cabeza a otra, como podríamos imaginar, su morfología no les permite saltar, volar o nadar. Lo que sí saben hacer bastante bien es caminar muy rápido (30 cm por minuto). Por lo tanto, si tu hijo ha sido infestado con piojos, fue porque en algún momento su cabello tuvo contacto con el cabello del niño infestado.
Les encantan las temperaturas cálidas entre los 23 y 37 grados centígrados ya que favorece su reproducción. En cambio, las temperaturas frías o extremas interrumpen su ciclo reproductivo.
Un piojo tiene un tiempo de vida de 30 a 40 días. Lo que los hace tan abundantes no es su longevidad, sino su capacidad reproductiva, ya que las hembras ponen entre 30 y 40 liendres al día a lo largo de toda su vida.
Si has llegado hasta aquí te has convertido en todo un conocedor sobre los piojos ¡Y no solo eso! Sino también en el peor enemigo de esos parásitos que ahora pueden estar habitando el cuero cabelludo de tu hijo o de tu familia.
Sin embargo, debes entender que el proceso de eliminación de los piojos requiere paciencia, ya que implica varios días de tratamiento ininterrumpido para poder garantizar excelentes resultados, sea cual sea el remedio que hayas seleccionado.
No queda más que destapar ese champú antipiojos, preparar ese peine y arremeter con furia contra ese minúsculo pero molesto enemigo.
¡Al ataque, guerrero!